El Museo Reina Sofía apuesta por la cultura de calidad y por eso, a pesar de la pandemia, continúa con su actividad con excelentes apuestas que pueden verse, además, sin aglomeraciones, especialmente si se visitan entre semana.
El sonido en el Museo Reina Sofía
Una de las muestras que más me ha gustado ha sido la de Audiosfera, realizada con el patrocinio de audio-technica. Experimentación sonora 1980-2020, propone cubrir un vacío histórico y cultural en cuanto al reconocimiento, exposición y análisis de una parte esencial de los cambios recientes que se han dado en la concepción artística de la creación sonora.
Concebida desde una perspectiva social, con el objetivo de revelar y proporcionar un contexto para la reflexión y discusión sobre los cambios tecnoculturales ocurridos desde la década de 1980, la exposición presenta el trabajo de un gran número de artistas sonoros experimentales, originarios de diversas partes del mundo, la mayoría de los cuales son desconocidos para el público de arte contemporáneo.
Siguiendo con la misma temática, se puede ver también Disonata. Arte en sonido hasta 1980, que abarca cómo a lo largo de los diferentes movimientos de vanguardia del siglo XX, y a medida que avanzaban los procesos por los que la música se liberaba de sus propias normas, el sonido prosperó en espacios artísticos que no habían sido explorados con anterioridad, más allá de la música.
Esta exposición muestra una selección de formas, aproximaciones y casos singulares, a la vez que recoge distintas iniciativas que desbordaron las categorías predefinidas del arte moderno y contemporáneo hasta 1980. El recorrido pone de relieve diferentes momentos cruciales: la experiencia futurista de construir instrumentos para entonar ruidos; la fascinación de los artistas visuales por el magnetófono en los años centrales del siglo XX; o los experimentos espaciales, musicales y multimedia, como el Pabellón Philips de la Exposición Universal de Bruselas de 1958, dirigido por Le Corbusier y con contribuciones arquitectónicas y musicales de Iannis Xenakis con Edgard Vàrese.
Como instalación de sonido también encontramos Auto Sacramental Invisible. Una representación sonora a partir de Val del Omar, que incorpora componentes teatrales, musicales e instalativos que, en la interpretación propuesta por Niño de Elche, se descentran —explotan— a través de una pluralidad de voces orientadas simultáneamente tanto hacia la España de 1952 que vio nacer su obra, como a este 2020 en que el Museo Reina Sofía acoge, en primicia, su presentación.
Otras exposiciones del Museo Reina Sofía
El Museo Reina Sofía presenta también la exposición La bondadosa crueldad, que toma su título del libro de poemas y collages de León Ferrari (Buenos Aires, 1920-2013) en el que el artista advertía acerca de una “crueldad tan íntimamente mezclada con la bondad, que la oculta”.
Esta muestra propone un recorrido no lineal por la obra de León Ferrari, cuyas búsquedas estético-políticas indagan en las fallas comunicativas del lenguaje, la ceguera, el error, las escrituras ilegibles o el humor como modos de tensionar la literalidad de la palabra y la imagen explorando otras formas de belleza, para extender los límites de lo posible y lo enunciable.
La última de las exposiciones temporales es la de Mondrian y De Stijl sobre la revista holandesa De Stijl, que promocionaba un arte abstracto basado estrictamente en las relaciones entre formas rectangulares, planos de color y líneas rectas y cuyo fundador fue Piet Mondrian.
La exposición reúne muestras del trabajo de Mondrian y de algunos de sus compañeros de movimiento. El catálogo que la acompaña arroja nueva luz sobre las estrategias desarrolladas por Mondrian para presentar sus obras de manera que los espectadores pudieran elucidar su significado y descubrir una relación clara y significativa tanto con ellas como con el mundo que las rodea.
Una oferta de calidad para disfrutar un día tranquilo y seguro en el museo.
Deja un comentario